La emigración (Sierra de Segura)

HOMENAJE AL EMIGRANTE SEGUREÑO

A partir de los años 60, la Sierra de Segura sufre un fuerte éxodo de sus pobladores hacia otras zonas de España y el extranjero.
Comunidades como Cataluña, Aragón, Madrid y levante (entre otras) acogieron a miles de segureños que emigraron en busca de mejoras económicas y humanas porque aquí no podían encontrarlas. Dejaron atrás su familia, tierra, cultura, amores…, y trabajaron duramente en el proceso de desarrollo de otras zonas más prósperas.
Así, el campo se fue despoblando poco a poco, muchas infraestructuras rurales y viviendas se abandonaron, algunos oficios, costumbres y tradiciones dejaron de practicarse y la cultura rural en general se fue empobreciendo paulatinamente.
Esta pérdida de población, el desarraigo cultural y la consecuente pérdida de identidad, provoca aún más la ya lamentable situación que venía padeciendo históricamente el segureño y su entorno. La población está muy diseminada, tiene miedo, muy poca formación y ninguna posibilidad de gestionar recursos para afrontar procesos de desarrollo o lucha social.
Esto fue debido entre otras cosas, al acomodamiento de una administración fascista y el entonces ICONA que se limitaron a especular y a abusar de la mano de obra barata y sumisa de pobres gentes analfabetas.
A raíz de estas circunstancias histórico políticas y sus intereses, la población segureña se vio abocada a una situación de esclavitud en un sistema caciquil que tenia el monopolio del trabajo y del pan de cada día.
Afortunadamente, a partir de la transición democrática y con mucho esfuerzo, la Sierra de Segura empieza a despertar del largo letargo histórico provocado en un principio por la declaración de Provincia Marítima (1748) y posteriormente a los cuarenta años de un oscuro e inhumado régimen dictatorial.
Los emigrantes e hijos que consiguieron mejorar su vida, en la actualidad vuelven a su tierra para rehabilitar sus viviendas, recuperar la tradición y disfrutar de lo que sus antepasados no pudieron.
Es labor de las nuevas generaciones trabajar en el diseño de una nueva sociedad para construir un futuro más participativo y respetuoso en el aprovechamiento de los recursos y la gestión del patrimonio en general, solo así, podremos hablar de identidad Comarcal y de desarrollo consciente y sostenible.
Con esta reflexión queremos reconocer y homenajear a todos aquellos/as héroes que un día tuvieron que abandonar la tierra que les vio nacer para alimentar a su familia y su dignidad. Que esta historia no se repita nunca más y que todo el sufrimiento pasado quede solo para el recuerdo en las páginas negras de la historia de la Sierra de Segura.

Gracias a todos/as , e id libres para volver mas libres.

José Laso.